Promesas incumplidas.

feet

Prometí no volver a pensar en ti.

Prometí no flaquear al verte, contener la risa nerviosa y hacerme la indiferente.

Prometí no sorprenderme cuando dieras señales de vida después de un eterno letargo.

Prometí ignorar tus mensajes.

Prometí no confiar en ti.

Prometí no ceder.

Prometí aprender a caminar con la cojera.

Prometí no volver a nombrarte en ninguna conversación.

Prometí no imaginar qué estarás haciendo o…con quién.

Prometí hacerme a la idea de que sólo fuiste uno más, haciendo de mí algo menos.

Prometí no compararte con otros, aunque ninguno me dé lo que tu me diste o lo que me tenías que haber dado.

Prometí que dejarías de doler.

Prometí no derramar ni una lágrima o sonrisa más al recordarnos.

Prometí no envidiar lo poco que un día hubo.

Prometí no tener celos de lo que pudo ser.

Prometí no desear que estuvieras aquí.

Prometí no quererte de vuelta.

Me prometí olvidarte…

Y aquí seguimos, yo incumpliendo mis promesas y tú, de nuevo protagonista.

Prometí no prometer. Y continúo faltando por enésima vez a mi palabra y a mí misma.

Prometo que un día dejaré de autoengañarme con falsas promesas, pero mientras seguiré haciéndolo en vano, es una más de las secuelas que me has dejado.

T.

17 comentarios

  1. Me siento tan identificada, pareciera salido de mi misma. Resulta complicado no romper una promesa que va en contra de lo que realmente quieres. ¿Qué sentido tiene ir contra uno mismo? Rompamos promesas pues!
    Fantástico post 🙂

    Le gusta a 2 personas

  2. Esas promesas que siempre nos obligamos a cumplir pero que nunca cumplimos… Somos un poco masocas no?
    Parece que nos gusta sufrir y sin embargo, es inevitable…
    Chiquilla (si se me permite llamarte así desde el anonimato jaja) yo no se que tiene lo que escribes, que cuando te leo me dan siempre unas ganas enormes de tocar la guitarra, cogerla y olvidarme de todo, tocas esa maldita o bendita tecla, según como se mire y haces que me entre algo por dentro…
    Un beso enorme de tu reciente admirador!
    Que nada ni nadie, nos haga olvidar esas promesas, que tarde o temprano se cumplirán!

    PD:Perdón por el testamento…:)

    Le gusta a 2 personas

    1. Yo es que soy masoca de nacimiento…jajaja
      «Chiquillo» no me digas esas cosas que me pongo colorada… (aunque nadie me ve jaja) y por favor! Además de seguir escribiendo estos testamentos, toca la guitarra y olvídate de todo!! Me alegra mucho que los textos te sirvan de inspiración, aunque seguro que lo llevas dentro, tan sólo es un empujoncito 😉
      Un abrazo Roberto!
      T.

      Me gusta

      1. No se sonroje chiquilla! Que no tiene por qué…todo lo que tengo es admiración y mucha intriga… a parte también de muchísimas ganas y expectación por el siguiente, para poder desconectar, disfrutar y como no, por hablar con la señorita anónima! Jajaja
        Y sí, eres una inspiración para darle a la guitarra… Es culpa tuya que no la suelte desde que empecé a leerte y eso que la tenía abandonada…
        Un abrazo enorme señorita!

        Le gusta a 1 persona

Cuéntanos que piensas! Deja un comentario : )